Tranquilidad, profesionalismo y atención a cada detalle; una puerta que siempre está abierta para todo su personal, amabilidad, compasión y una sonrisa para todos, así es Mirna Pech, la ama de llaves ejecutiva de Royal Resorts que está celebrando sus 40 años de trabajo en Royal Resorts.

Originaria de la pequeña ciudad de Sotuta en Yucatán, la familia de Mirna se mudó a Cancún en 1976, cuando estaban surgiendo los primeros hoteles. Comenzó a trabajar como camarista en el Royal Cancún, en ese entonces VCI, el 30 de enero de 1979, y recuerda los primeros días: “Éramos de ocho a diez en el servicio de limpieza, todos bajo las órdenes de Doña Pilar Quintal, la ama de llaves. Ella nos enseñó a trabajar con los más altos estándares y su meticulosa atención a los detalles es algo que nos inculcó a todos. Éramos una familia. Ella nos cuidaba, tanto al personal como a los huéspedes, e incluso cocinaba para nosotros una vez a la semana.”

Mirna añade: “El resort estaba en construcción cuando empecé y teníamos que pasar por la obra en nuestras rondas de limpieza, pisando los escombros y cruzando las baldosas como si fuera una carrera de obstáculos. Fue todo un reto, como lo es todo cuando apenas estás empezando. También recuerdo que tenía que caminar un largo trecho desde mi casa hasta la parada del autobús y esperar en fila para que un autobús me llevara a la Zona Hotelera. ¡No había tantos autobuses como ahora!

“Cancún era el paraíso en los primeros días, había muchos pájaros y animales, ¡incluso teníamos mapaches en VCI! Y por supuesto la vida marina era increíble. Todavía es hermoso aquí, aunque ha habido muchos cambios a lo largo de los años debido al dramático crecimiento.”

Mirna trabajó como camarista en The Royal Cancún durante tres o cuatro años y luego fue ascendida a supervisora y luego a asistente de ama de llaves del resort, pasando otros tres años en cada puesto.

Recuerda a un invitado no deseado que llegó a Cancún en septiembre de 1988 a causar estragos: “Nunca olvidaré el huracán Gilberto. No teníamos días de advertencia de que una tormenta se aproximaba como los tenemos ahora. Recibimos la alerta el mismo día en que el huracán tocó tierra. Me enteré solo por casualidad escuchando la radio del taxi de camino al trabajo. Tan pronto como llegué a The Royal Cancun, me di cuenta de que la advertencia general había sido dada y colaboré con todo el resto del personal para ayudar a proteger las villas tanto como pudimos.

“El día después de la tormenta no había transporte público, así que caminé seis kilómetros para llegar al resort. La devastación fue increíble: árboles caídos, arena por todas partes, el barco pesquero cubano que encalló en Las Perlas, salieron volando camas, sofás, televisores y minibares de las habitaciones por la furia de las olas y fueron a dar al boulevard Kukulcán o flotaban en la laguna. No sabía qué esperar en The Royal Cancun, pero cuando llegué al resort se levantaron mis ánimos. Hubo algunos daños y las villas frente al mar en los niveles inferiores estaban inundadas por el oleaje de la tormenta, pero no fue nada comparado con la destrucción que había visto en mi camino al trabajo. Todos contribuimos para empezar la limpieza y las reparaciones de inmediato.”

Dos semanas después de la tormenta, Mirna fue transferida a The Royal Caribbean para comenzar un nuevo trabajo como ama de llaves del resort. Ella estuvo a cargo del departamento de ama de llaves en The Royal Caribbean por 14 años y en el 2002, fue promovida al puesto de ama de llaves ejecutiva con responsabilidad general en The Royal Cancun, The Royal Mayan, The Royal Caribbean, The Royal Islander y The Royal Sands. Dice: “Tuve que enfrentarme a muchos retos en el camino, pero siempre los considero una oportunidad para aprender y crecer profesional y personalmente.

“Actualmente hay alrededor de 400 empleados en los departamentos de limpieza y lavandería,” dice Mirna. “Todos saben que mi puerta siempre está abierta para ellos cuando necesitan ayuda o algún consejo. Valoro a todos y cada uno de ellos, son la columna vertebral de la empresa. Algunos de los encargados de la limpieza que trabajan en las áreas de huéspedes del resort son tan jóvenes que me hacen sentir muy protectora con ellos, especialmente cuando los oigo hablar de sus vidas.

Mirna ha sabido balancear las exigencias de su carrera con la vida familiar. Conoció a su esposo en 1987 cuando ambos trabajaban en The Royal Cancun y tienen dos hijas, ambas estudiantes universitarias. Reflexiona: “Mi trabajo es exigente y estresante con mucha responsabilidad. Cuando mis hijas eran más pequeñas, mi mamá y una de mis hermanas me ayudaron a cuidarlas cuando yo tenía que trabajar.”

Sobre algunos de los cambios que ha visto en su trabajo durante más de 40 años, Mirna dice: “Creo que el crecimiento de la empresa nos ha obligado a implementar nuevos procesos y estándares a lo largo de los años para que nos mantengamos a la vanguardia de la industria y ofrezcamos el nivel de servicio, comodidad y hospitalidad que nuestros huéspedes se merecen. Estamos en constante evolución, por ejemplo, cambiamos productos de limpieza, jabones, abrillantadores y barnices por alternativas ecológicas para ayudar a proteger el planeta. Hemos reducido el uso del cloro. Utilizamos una pintura ecológica en las cunas, papel reciclado para la papelería de la habitación y, por supuesto, reciclamos basura de plástico, vidrio, aluminio y cartón.”

Desde juntas con las amas de llaves en los resorts hasta revisiones de presupuestos con la gerencia, compra de ropa de cama y electrodomésticos, coordinación de las necesidades de capacitación y monitoreo de la satisfacción y comentarios de los huéspedes, el día de Mirna siempre está ocupado. Ella cuida los estándares y siempre busca maneras de hacer que los socios y huéspedes se sientan más cómodos. Se encarga de programas de renovación de las villas como el que se está llevando a cabo en The Royal Sands, trabajando con proveedores y ayudando a seleccionar telas, esquemas de color y accesorios. Y a finales de noviembre supervisa a los equipos de personal de limpieza mientras decoran los resorts para Navidad.

Al ver que el personal sigue sus pasos, Mirna dice: “Me encanta ver a los miembros de mi equipo convertirse en supervisores o gerentes o hacer su trayectoria en otras áreas de la empresa. Me siento feliz por ellos y orgullosa de que hayan empezado conmigo y hayan aprovechado las oportunidades de capacitación.

“Me gustaría agradecer a mi equipo por su entusiasmo, compromiso y por todo su arduo trabajo. A los que se han incorporado recientemente les diría que Royal Resorts les ofrece muchas oportunidades y para tener éxito necesitan estar orientados al servicio, ser responsables y muy meticulosos, siempre buscando la perfección en todo lo que hacen. Y que deberían inscribirse en cursos de capacitación, informática y talleres de inglés. Incluso pueden completar su educación primaria, secundaria y preparatoria si no pudieron terminar la escuela.

“Mi mensaje a nuestros socios y huéspedes es agradecerles su lealtad a la compañía y su afecto por los empleados. Gracias por elegir a Royal Resorts como su hogar lejos de casa en el Caribe mexicano. Siempre estaré agradecida por las oportunidades que he tenido aquí y por la oportunidad de innovar y mejorar los servicios que les ofrecemos.

“Royal Resorts significa mucho para mí. He crecido con la empresa, profesional y personalmente. Ha sido una gran parte de mi vida durante mucho tiempo.

Agradezco a los directores de Royal Resorts por darme la oportunidad y por confiar en mí. Compartieron su visión de la excelencia y siempre han puesto gran énfasis en la capacitación y en el valor y la importancia del personal. A pesar del tamaño de Royal Resorts, todavía se puede sentir la calidez y el espíritu comunitario que comenzó en los primeros días de The Royal Cancun.

Mirna concluyó diciendo: “Recordando mis 40 años en Royal Resorts, me siento muy feliz y afortunada de tener todo lo que tengo, mi familia y mi trabajo. Profesionalmente, han sido 40 años de éxito, llenos de inmensas satisfacciones y oportunidades de aprendizaje. He disfrutado cada día. De hecho, no se sienten como 40 años porque amo tanto lo que hago. Espero seguir durante muchos años más.”